En la historia de la Humanidad han existido las edades de Piedra y de Bronce, de Hierro y del Átomo. Según los mitos, la Edad del Oro fue antecesora a todas ellas. De hecho, toda la época de las civilizaciones es, en sí misma, una Edad de Oro. El espíritu de la época, talento, sabiduría y habilidad de muchas generaciones se guardan en sus obras de oro. Las cúpulas de las iglesias, los sepulcros, preciosas salas y palacios han estado iluminados con su brillo dorado. Con él se han realizado la majestuosidad de reyes y la belleza femenina. Cristales de oro nativo y sus pepitas adornan museos y colecciones privadas. Este libro está ilustrado con fotografías de piezas minerales de oro y de joyas antiguas y modernas presentes en los mejores y más famosos museos del mundo y en colecciones privadas, desconocidas incluso para muchos especialistas. |